INGREDIENTES
- Pechuga de pollo de calidad (en nuestro caso es pollo de corral) (4 filetes)
- 1 cebolla
- Setas variadas
- Mazorcas de maíz "baby"
- Guisantes frescos
- Tirabeques
- 1 Alcachofa fresca (sólo el corazón y limpia de filamentos)
- 1 Zanahoria
- Brócoli
- patchoi
- Hierba limonera
- Gengibre fresco
- Pasta de cacahuetes
- Salsa de soja
- Un chorrito de aceite de oliva vírgen extra
- Unas gotas de aceite de cacahuetes (opcional)
- Quinoa
- Fideos de arroz
PROCEDIMIENTO
- Ponemos el Wok al fuego vivo (si no tienes, usa una sartén grande antiadherente de fondo grueso con el aceite
- Salteamos el pollo en tiritas y cuando está dorado, añadimos las verduras que previamente tenemos cortadas... como te gusten!, además de hierba limonera y gengibre fresco rallado.
OJO... importante. las verduras deben de quedar "aldentes"... duritas, poco hechas, crujientes... no te pases de cocción!!. Precisamente, la gracia y lo saludable del wok, radica en cocinar a altas temperaturas en poco tiempo para conservar propiedades, sabor y texturas. La verduras que son más duritas (por su composición o tamaño), pueden ser escaldadas previamente en agua hirviendo (poco más de un minuto) y luego se añaden al wok.
Añadimos la salsa de soja, una cuharada de pasta de cacahuetes, la quinoa previamente cocida (instrucciones en el paquete) y los fideos de arroz (también siguiendo las instrucciones del envase.
Como veis, en la receta no aparece la sal... la salsa de soja ya lleva suficiente y es mejor no añadir en exceso (por salud y sabor).
